Política exterior chilena y MERCOSUR : hacia una seguridad subregional con medidas de confianza mutua (2000-2010)

Jorge Vera Castillo
2011 Estudios Internacionales  
En este artículo. el autor propone el establecimielJ/O de nuevas f017nas de vinculación entre Chile y el MERCOSUR. considerando no so/amente /0.1' aspectos comerciales y económicos. sino también, la cooperación política que incorpore la seguridad y la defenscl. La búsqueda de una seguridad sllbregional vecinal y vecinal viable, sllstentada en sólidas lvJedidas de Confianza Mutua, hará posible mantener la integridad nacional en el marco de lIn regionalismo abierto. Presentación El tema que
more » ... ollo en este trabajo, se resume adecuadamente en sus contenidos, en el título precedente, como propuesta de futuro, que se inicia hoy. La política exterior chilena, en el próximo decenio, debiera proponer distintivas y nuevas vinculaciones con el MERCOSUR, ya fuere en la tradicional esfera de las relaciones bilaterales con cada uno de sus cuatro actuales estados partes (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay), o bien, en tanto cuanto Chile cambie su actual condición de país asociado al MER-COSUR, pasando a ser estado parte (o país miembro) del MERCOSUR en un próximo futuro, dentro de los años venideros. Además estas relaciones exteriores del país deberán considerar el vínculo bilateral con Bolivia, dado que también es actualmente país asociado al MERCOSUR. Mas, en esta investigación y propuesta, nuestros énfasis estarán orientados a las relaciones de Chile con el MERCOSUR, propiamente tal, como proyecto e institucionalidad de integración subregional en América del Sur, que (72) Jorge Vera Castillo I Política exterior chilena y L\IERCOSUR Política exterior chilena en la perspectiva del período 2000-2010: Una mirada hacia el MERCOSUR La política exterior chilena, durante el primer decenio del próximo siglo XXI, tendrá nuevos desafíos, oportunidades, perspectivas y potencialidades. Por cierto, esto no será indiferente al conjunto del desarrollo y la evolución política del país; ni podría plantearse en forma totalmente aislada, autónoma, diferente o distante, marchando por sus propios rumbos o, incluso, según las egocéntricas decisiones personales de un Ministro de Relaciones Exteriores, como ejecutor de las atribuciones especiales constitucionales del Presidente de la República, en cuanto a la conducción en esta esfera especifica de la política gubernamental del Estado. Para Chile, como país pequeño en población y producto nacional; alejado geográficamente de los grandes centros mundiales, y, dependiente y vulnerable en su inserción en la economía capitalista mundial-entre otras características y factores determinantes, identificatorios, limitan tes y orientadores-, lo anterior es extraordinariamente válido, vigente y siempre necesario a ser tenido en cuenta. Una adecuada síntesis de aquello, se encuentra en un aserto que escribiera hace ya poco más de un siglo un autor español. El postuló que: "el punto de partida de la política exterior de un país es la política nacional, puesto que de ésta depende el rumbo que se ha de imprimir a aquella; y asimismo el punto de patiida de la política interior es la idea que se tiene del papel que la nación ha de representar en la política extranjera". 3 Asimismo, otro elemento significativo, de carácter general, que toda elaboración,formulación y puesta en práctica de Política exterior debiera considerar es la actual situación y configuración de las relaciones internacionales, que han dado paso a lo que se conoce -sin mayor definición y/o precisión-como "globalización" o "proceso de globalización", siendo así "un concepto imperfecto"" Si bien lo anterior no es enteramente nuevo, sí se trata de una nueva de-) Véase Gavinet, Angel. Idearium español, (escrito en octubre de 1896), Aguilar s.a. de Ediciones, Madrid, 1964. pp. 78 Y 79· ~ Véase en Panorama de la insercion internacional de America Latina y el Caribe, edición 1996. Comisión económica para América latina y el Caribe· Cepal, Santiago, lc/g.1941, 2 de diciembre de 1996, primera parte, capítulo i. a., pp. 19" 26.
doi:10.5354/0719-3769.1999.14997 fatcat:ateqw4ivxvfkxb6mqobx52tz3y