BESPRECHUNGEN
1907
Zeitschrift für Romanische Philologie
BESPRECHUNGEN. Cortejon, Clemente. El ingenioso Hidalgo don Quijote de Mancha. Primera edicion critica, con variantes, notas, y el diccionario. Madrid 1905 (Primer tomo), 300 y CLXVI, 1906 (2°) 404 y LXXXIIIpägs. Victoriano Suarez. Cuarto. El aulor misrao de esta hermosa obra lo dice en la pag. 208 del primer tomo: "para los que, como Aristarco, han de cumplir el noble cargo que en la persona de este les confio el poeta de Venusa, fijar el texto de una obra cldsica es ocupacion meritfsima, de
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... itico que mira, ä la vez, al fondo y ä la forma, ya que la obra artistica se presenta como cuerpo animado, cuya alma se conoce por lo que dice el mismo cuerpo.** Especialmente para arremeter con el Quijote, tiene uno que saber raas que Lepe, Lepijo y su hijo, y disponer de una biblioteca como la del "quijotista" Bonsoms. Y como hay remuchisimo de que" hablar, aqui termina el introito. En el capitulo II de la Inlroduccion nos llena de curiosidad el autor sobre la riqucza de su Diccionario, dando una muestra ligera referente a echar. Dice que "conticne tan gran numero de vocablos, que en esta la mayor parte de los que se hallan en el Diccionario de la lengua castellana." Permitame el Sr. Cortejon lo ponga en duda. Cejador conto 9.350 palabras. A eso dije que solo en la A y la B tengo una coleccion de IOOO y unas docenas de pico. No puedo calcular el conjunto ahora, pero presumo no excedera mucho del numero de 10.000 palabras, cifra que manejo Shakespeare. He dicho en mi articulo "Diccionario Hispano-Americano" que las voces espaflolas suman proximamente 60.000, prescindiendo de los "dialectismos", algunos de los cuales estan incluidos entre los 59.227 vocablos que cita el diccionario acade*mico. En fin, allä lo veredes, dijo Agrages. Conforme en mencionar puntualizando: tomo, pagina y linea. "Citar solo los capitulos es lo mismo que no hacer nada, o poco menos. ^Quion se lanza a buscar una palabra en un capitulo de 30 päginas?" Pages, que pone al pie de las citas "Cervantes", tchese V. a buscar. Una ligera contradiccion hallo entre lo que el autor opina en la pag. LVIII y en la CXLII acerca de las impresiones lisbonenses. Alli dice que en un trabajo critico seria imperdonable dejarlas a un lado como lo hace Fitzmaurice-Kelly; y aqui, que no merecen la mds leve atencion. Brought to you by | University of Arizo Authenticated Download Date | 5/26/15 7:34 PM 5oö BESPRECHUNGEN, p. DE MUGICA, Recu£rdese que Fitzraaurice-Kelly se atiene a la primera de las dos ediciones de 1605 y Cejador a la de 1608, de Madrid, a la cual aquel niega autoridad, y d la de 1615. El Sr. Cortejon se siente como raovido a inclinarse respetuosamente ante la segunda de las tres ediciones de Cuesta, aunque compara las varzas lecciones de los criticos y elige lo raejor. El autor posoe la friolera de 350 ediciones. En el capitulo VI, el don Quijote en el extranjero, echo de menos una curiosa obrita: "Buscando las huellas de don Quijote, por Paz de Borbon". Su augusta autora honro mi ejemplar con una dedicatoria que mas bien corresponde al Sr. Cortejon que d mi: "al cultivador mas ferviente de la lengua de Cervantes". Yo no soy nadie comparado con £1. Tambion en el capitulo VII, los Comentadores y aludiendo al paralelo de Bowle entre D. Quijote y San Ignacio de Loyola, pudo recordar otro muy intencionado de Unamuno. En el comentario que seguird al texto vendran noticias historicas y bibliogräncas, gramaticales y criticas, sin fantaseos ni falsedades. De modo que vamos d saborear una labor riquisiraa, concienzuda, interesante, magna. Y ahora vamos al texto. Entremos en esos Campos Eliseos del Humor, que ya ha rauerto en Espafia, donde solo hay un humorista a estilo sajon, el insigne novelador Armande Palacio Valdes, como Cervantes, comprendido mejor por los ingleses que por los espaöoles. La comprension del Quijote, la debemos d l a raza anglo-sajona. Creo que al parir el nombre de Rocinante, su autor tenia vibrando aun en su cerebro el calificativo andante, acaso el nombre del gigante Morgante, y probablemente su mismo sonoro apellido, Cervantes. Una de las dificultades mds grandes con que tropiezan los extranjeros para leer el Quijote, es la mala distribucion de los pdrrafos. Cuando uno ve pdginas enteras sin un descanso, como ametralladas de letras, pierde el valor para echarse al cuerpo el libro. El Sr. Cortejon debio haber seguido d veces la division del traductor Braunfels, cuyo estudio califica con razon de magnifico. Por cierto, se le olvido en la pdg. CLX anotar la poblacion en que aparecio; quizd por no ser ya una, sino dos, Stuttgart y Berlin, omitio la "oriundez". Me parece que la mejor manera de interpretar la fräse del principio del capitulo II: "la/a/to que hacia su tardanza" puede ser: "la privacion que constituia su tardanza **. Se me ocurrio antes de ver el equivalente puesto por Braunfels, Entbehrung\ "es drängte ihn dazu der Gedanke an die E., die die Welt durch (influido por Hartzenbusch) sein Zögern erleide". Creo que "sano de Castilla" estd usado en el sentido recto. En el Quijote de Avellaneda, cap. XVII, se 16e: "hablando d lo sano de Castilla la Vieja". Mdinez lleva la razon contra Ochoa. El principio del capitulo IV: "La del alba seria", no hay porquo tacharlo. Es como el del VI: "El cual dun todavia". Asi como es graciosa aqui la omision de un nombre, es vigorosa y no enojosa la repeticion: "so pena de la pena pronunciada". Usese la segunda vez sentencia^ si parece molesta la repeticion; pero no estoy conforme con la pobre fräse "so la pena pronunciada". Brought to you by | University of Arizon Authenticated Download Date | 5/26/15 7:34 PM
doi:10.1515/zrph.1907.31.4.499
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